¿Eres realmente libre para usar el peinado que te gusta? ¿Podrías usar una peluca sin que nadie se riera de ti? ¿Tienes suficiente personalidad para hacerlo, pese al que dirán de los demás?
Usar peluca es de lo más habitual y te hará libre y diferente.
¿Sustituto del pelo?
Llevar un peinado atrevido, es algo que sólo está al alcance de personas entusiastas y atrevidas, personas que tienen una capacidad para ir más allá de los límites, y del pensamiento conservador, llegan a ser personas altamente creativas y a la vez trasgresoras, que se atreven a tender un puente hacia donde ni tan siquiera otros han decidido siquiera mirar, pero cuando el pelo no da para más, y queremos estar más bellos o bellas, ¿podemos ir más allá?
Una peluca disimulada
Pues claro, el ser humano que pierde cabello, o tiene problemas con él, quiere poder volver a la naturalidad, y eso es lo que aporta una buena peluca, un bisoñe, o un buen postizo, para quienes quieren recuperar la belleza pérdida, o aumentar la que ya tienen con un complemento como éste, que sirve para realzar el estilo y la belleza de quien lo porta.
No temas a mostrarte como realmente eres.
La peluca bien dispuesta, forma parte integral de la persona, y su buena disposición hará que nadie note la existencia de la misma.
El percance de una atleta
Se llama Blessing Okagbare, una atleta Nigeriana que competía en el salto de longitud de la Diamond League de Oslo, pero tras saltar paso algo insólito, y es que al caer sobre la tierra batida, se le cayo hacía atrás la peluca que portaba, sí perdió el postizo que llevaba, y esto causo que los jueces tuvieran que contabilizar su salto, desde la parte más retrasada de la atleta, que fue donde cayo la peluca, perdiendo así distancia en la medición del salto realizado de 6,50 metros, por el de donde cayo el postizo de 6,21 mts.
Medallista Olímpica con peluca
Nigeriana, con 28 años de edad, reconocida atleta y velocista, fue medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Pekín de 2008, con un salto de 6,91 y además acumula cuatro oros en el campeonato africano obtenidos en dicha prueba, en los 100 metros y en la prueba de relevos.
Una respuesta, la normalidad
La atleta se limito tras el salto a mirar a los jueces para que estos le permitieran acercarse a recoger la peluca, y con actitud indiferente hacia el público y como si con ella no fuera la cosa, recogió su peluca y se la volvió a colocar como si tal cosa.
Enseñanza
Está gran mujer destaca por ser una gran deportista, atleta olímpica, ha tenido que luchar y entrenar mucho para llegar a estar donde ella está, muchas aún queriendo no podrían llegar a donde ella ha llegado, pero también como cualquier otra mujer, u hombre, busca además su elegancia, y ahí también compite, y viste por lo tanto, una peluca para sentirse más bella, práctica la belleza, compite con la belleza y salta con belleza, la caída refleja nuevamente su naturalidad, pero su actitud vence, y la hace aún más bella, pues la belleza de su grandeza y de su gesto de humildad, es mayor que la de su apariencia, y la peluca solo queda en un sutil complemento, que no forma parte de su personalidad.
Aunque la peluca le resto distancia a la atleta, la persona Blessing Okagbare fue capaz de recogerla, y tal cual como si se pusiera una medalla, la peluca al final se la llevo puesta.
La medalla de la vida es, que si alguien te descubre eso oculto que nadie sabe, ni ve, te puedas levantar con indiferencia, sabiendo, que tu siempre lo has sabido aceptar, y reconocer.
Esta vida es para los y las valientes, con pelucas o sin pelucas, la peluca sólo es un complemento más, lo importante eres tú.
Javid